Se dice que este baile proviene de una
tradición pagana que formaba parte de los ritos de los indígenas que habitaban
lo que actualmente son los pueblos de Santiago y San Lázaro. La danza empieza
con un preludio en el que participan cinco actores: cuatro en el papel de
indios y uno como piache. Todos realizan una serie de movimientos que simulan
un acto ritual en el que el piache aparece con una caja, que tiene en su
interior una calabaza y un anafre con brasas encendidas.
La segunda parte se inicia con la entrada de
los enanos, quienes efectúan diferentes coreografías hasta la aparición de la
Muñeca de la Calenda, la cual al entrar en escena comparte diferentes
movimientos con éstos y el público.